viernes, 9 de julio de 2021

TESTIMONIOS ARTÍSTICOS

EL COLOR COMO VIBRACIÓN . 

Los gritos de angustia y de terror de los animales acosaban el oído del pintor, y muy pronto se condensaban en colores, en un amarillo chillón el grito, en sombríos tonos violetas el ulular de los búhos. ¿No son los sueños como sonidos, y los sonidos como colores, y los colores como música? Yo amo la música de los colores. Uno con otro o contra otro: hombre y mujer, placer y dolor, divinidad y diablo. También los colores se oponen mutuamente: frío y cálido, claro y oscuro, opaco y fuerte.
Los colores son vibraciones como de campanas de plata y sonidos de bronce; anuncian dicha, pasión y amor, alma, sangre y muerte.

E. Nolde 


LA PINTURA FUTURISTA. MANIFIESTO TÉCNICO (1910)

Todos percibirán entonces que bajo nuestra epidermis no serpentea al marrón, sino que resplandece el amarillo, que allí flamea el rojo y allí danzan, voluptuosos y acariciantes, el verde, el azul y el violeta. ¿Cómo se puede ver a un rosáceo un rostro humano, en tanto que nuestra vida se ha desdoblado sin ninguna duda en el noctambulismo? El rostro humano es amarillo, rojo, es verde, es azul, es violeta.

La palidez de una mujer que contempla el escaparate de una joyería es más iridiscente que todas las facetas de las joyas que la fascinan. Nuestras sensaciones pictóricas no pueden ser murmuradas. Nosotros las hacemos cantar gritar en nuestras telas como fanfarrias ensordecedoras y triunfales.

U. Boccioni,
C.Carra,
L. Russolo,
G. Balla
G. Severini

LA FUERZA SUGESTIVA

No sé si alguien habló antes que yo del color sugestivo. Quiero darte un ejemplo. Quiero hacer el retrato de un amigo, de un artista que sueña grandes sueños. Este hombre será rubio. Quisiera pintar en el cuadro toda la admiración, todo el amor que siento por él. Para empezar, pues, lo pintaré tal como es, tan fielmente como me sea posible. Pero con este con eso no está terminado el cuadro. Para contemplarlo me convertiré ahora en colorista arbitrario. Exagero el rubio del cabello: llego a tonos naranja, a un amarillo cromo, a un claro color limón. Detrás de la cabeza pinto, en lugar de la pared habitual de una pieza vulgar, el infinito. Hago un fondo con el azul más fuerte que puedo producir. Y así la rubia cabeza luminosa, sobre el fondo, Adquiere un efecto místico, como la estrella en el profundo cielo…

Lo que busco en el cuadro café nocturno es expresar, con el rojo y el verde, la espantosa pasión de los hombres. No es un color literalmente cierto desde el punto de vista del realismo, pero si un color sugestivo, que expresa la agitación de un ardiente sentimiento… Trato de expresar que el café es un lugar donde uno pueda enloquecer y hasta cometer un crimen. Lo intenté a través de la oposición de un rosa tierno, del color rojo sangriento y sombrío del vino, y a través de un verde dulce y un verde Veronese, que también contrasta con un verde amarillento y un duro verde azulado. Todo ello expresa la atmósfera de un ardiente submundo, un pálido sufrimiento, las tinieblas que tienen poder sobre los dormidos.

V. Van Gogh